Un viaje, una reflexión...

En un lugar remoto, comprendes de lo alejada que estas de esas cosas que en la gran parte de tu tiempo te atormentan, peleas, obligaciones, rutina, esa bendita rutina que te persigue todo el tiempo viendo en que momento hacerte caer sin que siquiera lo notes. Respiras profundo, agradeciendo en silencio que todo eso al menos por estos breves días te dejen respirar, con esa calma y despreocupación que deseabas hace tiempo.  Ignorando esas personas que con la que tiempo atrás nunca habías compartido mas que un comprometido "Hola" y un simple "Adiós", y con las que en ese momento estaban destinados a pasar horas juntos como fruto de ese viaje que sin previo aviso había tocado a tu puerta, y debido a lo tentadora de la oferta no pudiste decir no. Tomas tu libro en una mano y un café en la otra, te acurrucas en el rincón mas cómodo del sofá, con el sonido de la lluvia caer de fondo escuchas comentario del tipo "-¿Otra vez con ese libro?" "-Que vicio que sos." "-Te voy a quemar todas esas cosas de una vez. -Oh, si lo haces ¿Podrías quemar los míos también? Una voz a tu espalda, recita con un brillo de esperanza en sus ojos." 

Lo mas triste de todo eso, es que vos formaste parte de ellos, sin conocer lo magnifico de cada palabra, de cada oración, de cada párrafo, de cada hoja, ¡DE CADA HISTORIA! Pensas en como sobreviviste tanto tiempo sin sentir la textura de esas letras encuadernadas, sin conocer hasta el punto de sentirte intimo con tu autor favorito, como podías estar tranquila sin siquiera conocer esas emociones que te genera el leer las ultimas palabras de tu libro favorito, con una mezcla de tristeza y felicidad sientes tus ojos húmedos, y ese nudo en la garganta que sin prisa te amenaza con hacerte escapar un pequeño llanto. Pero al final, tu lograste entrar en este fascinante mundo de la lectura, y te sientes orgullosa por ello, pero aun así no puedes evitar sentirte triste por aquellos que no comprenden, o que simplemente ni se esfuerzan por comprender de lo que hablas cuando intentas explicarle lo excitante que es poder leer un buen libro, pero en cambio de eso, se ríen, se te ríen en cara, en esa misma cara con la que los miras con compasión, rogando que si no encuentran la pasión en los libros, al menos que lo hagan por cualquier cosa con tal que se sientan llenos al hacer lo que les gusta como lo haces tu. Aunque no puedes evitar esperar conocer a alguna alma que comparta lo mismo que tu y con la que puedas expresarte como te gustaría.

Este fue un breve relato para describir como me siento en este momento, no se si lo logre, si  me llegaron a comprender o si no, pero la realidad es que ya no busco que alguien lo haga, solo busco un lugar en donde sentirme cómoda y por ahora este sitio junto a ustedes bloggeros, es el  único lugar en donde lo hago. Realmente les agradezco a todos los que me leen, no les prometo que escribiré mas seguido, porque la realidad es que esas obligaciones que con el tiempo vas adquiriendo me impiden escribir como a mi me gustaría, pero aun así, daré mi mejor esfuerzo.